Senador Tom Cotton, habla sobre El Salvador en la cámara del Senado de los Estados Unidos

senador Cotton habla sobre su visita a El Salvador en la Cámara del Senado de Estados Unidos

En el mes de marzo del 2024, uno de los senadores de Estados Unidos que conforman la United States Senate chamber (la cámara del Senado) visió El Salvador para ver de primera mano la transformación que ha estado pasando en El Salvador.

El senador es Tom Cotton, el cual representa al estado de Arkansas en el Senado de los Estados Unidos.

Posteriormente a su visita a El Salvador, dio un discurso en la misma Cámara del Senado donde cuenta lo que vio.

Además, al ser un senador republicano, hace énfasis en la postura de Joe Biden (Presidente de USA en marzo del 2024) y su política en favor del desorden y el caos.

El senador hace ese énfasis en como Biden maneja Estados Unidos y como ha contribuido a la decadencia de Estados Unidos, aunque por supuesto, el senador Cotton no menciona dicha decadencia pero se entiende entre líneas.

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Senador Cotton visita la carcel CECOT de El Salvador
El Senador Cotton en su visita de dos días en El Salvador visitó junto al Ministro de Justicia y Seguridad (Gustavo Villatoro) la cárcel CECOT. Imagen compartida el 21 de marzo 2024 en la cuenta del Senador en x.com (antes Twitter).
Índice
  1. Cámara del Senado de USA ¿Que es?
  2. Palabras del Senador Cotton en la Cámara del Senado
  3. Datos extra
  4. Resumen

Cámara del Senado de USA ¿Que es?

Para poner en contexto sobre en que lugar fue que el Senador Cotton habló sobre El Salvador, es necesario explicar ¿Que es la Cámara del Senado de los Estados Unidos?

En inglés lleva por nombre "United States Senate Chamber" y es el lugar donde los 100 Senadores del país se reunen para legislar, debatir, enmendar y votar sobre propuestas de ley, así como llevar a cabo otras funciones legislativas importantes.

Esta cámara es clave para Estados Unidos, ahí se deciden cosas que cambian (y han cambiado) el curso de Estados Unidos. Lamentablemente muchas de esas decisiones han sido malas pero esa ya es otra historia.

Aquí lo importante es entender que se trata de una cámara desde donde se dirige buena parte del país (Estados Unidos) tanto a nivel doméstico como a nivel internacional.

cámara del Senado de los Estados Unidos
Vistazo de como es el Senate Chamber o Cámara del Senado de los Estados Unidos. Imagen: lithub.com

Para que se hagan una mejor idea, en la cámara del Senado de los Estados Unidos, los senadores debaten y votan sobre legislación, aprueban tratados internacionales (con el consentimiento de dos tercios de los presentes), confirman nombramientos presidenciales como jueces federales, miembros del gabinete y embajadores.

También tienen el poder de llevar a cabo juicios de impeachment, entre otras funciones legislativas y de supervisión.

El senador Cotton es uno de los 100 senadores que se reunen en esa cámara. Cada estado de los Estados Unidos cuenta con dos representantes en el Senate Chamber o Cámara del Senado y el senador Cotton es uno de los dos representantes que el estado de Arkansas tiene en esa cámara como representante.

Como dato extra sobre esta cámara, cabe mencionar que puede ser visitada por el Vicepresidente de los Estados Unidos, quien sirve como Presidente del Senado y tiene el voto de desempate en caso de ser necesario.

Así que como podrán ver, para Estados Unidos es una cámara muy importante.

Para nosotros en esta situación más bien es algo curioso y para saber en que lugar se llevo a cabo el discurso del Senador Cottón. Aunque en algún punto del discurso mencionamos que el senador mencionó algún dato erróneo pero a nivel general es un discurso bastante interesante.

Palabras del Senador Cotton en la Cámara del Senado

Para quien no quiera leer todo el discurso, hemos señalado en color rosado y en color amarillo las partes que consideramos más importantes.

Recientemente regresé de un viaje a El Salvador, donde conocí al presidente Nayib Bukele y vi de primera mano los efectos de su notable transformación de ese país.

Pasó de ser la nación más peligrosa de nuestro hemisferio a una de las más seguras. Mientras conducíamos alrededor de San Salvador, las imágenes eran comunes, pero extraordinarias: niños jugaban fútbol en los parques, jóvenes mujeres corrían al atardecer, parejas cenaban al aire libre.

Eran comunes porque uno esperaría ver tales escenas en cualquier comunidad decente, y extraordinarias porque hace solo unos años eran impensables.

Desafortunadamente, este viaje también me recordó que el presidente Biden es tan débil, impopular y divisivo en el extranjero como lo es en casa. Y así como aquí protege a criminales y carteles, a menudo simpatiza con ellos en otras naciones.

Desde que asumió el cargo, el presidente Biden se ha negado a reunirse con el presidente Bukele, el secretario de Estado Tony Blinken lo ha criticado y la administración ha reducido significativamente la asistencia extranjera a su gobierno.

Uno debe preguntarse por qué, después de todo, el presidente Bukele es el líder más proamericano de América Latina y ganó abrumadoramente dos elecciones libres y justas, debo añadir, contrariamente a las alegaciones liberales (Nota: en USA los socialistas son llamados "liberales").

De hecho, una de sus mayores proporciones de votos provino de salvadoreños que viven fuera del país, incluidos los Estados Unidos, lejos de cualquier supuesta intimidación o coerción dentro de El Salvador.

Eso no es sorprendente, porque después de años de derramamiento de sangre, el gobierno de Bukele está brindando estabilidad y seguridad a un país que lo necesita desesperadamente, lo cual también es bueno para Estados Unidos.

Ha habido un descenso del 40% en la llegada de migrantes salvadoreños ilegales a nuestra frontera. No, Joe Biden no se opone al presidente Bukele por razones buenas o ecuánimes, se opone porque Bukele es duro con las pandillas asesinas de El Salvador, la más prominente de las cuales es la MS-13, un grupo con el lema psicótico de "matar, violar, controlar".

Nuestro propio país ha experimentado con esta sádica pandilla. En 2017, no muy lejos de aquí, en Wheaton, Maryland, miembros de la MS-13 decapitaron a un hombre, le sacaron el corazón y lo apuñalaron más de cien veces.

El año anterior, miembros de la misma pandilla asesinaron a dos adolescentes en Long Island, Nueva York, utilizando bates de béisbol y un machete. Y apenas el año pasado, un miembro inmigrante ilegal de la MS-13 en California fue condenado por torturar y asesinar a un niño de 10 años. Déjenme decir eso de nuevo: torturó y asesinó a un niño de 10 años.

Eso es lo que ha hecho la MS-13 aquí, en América (Nota: recordando que los estadounidenses acostumbran llamar "America" a Estados Unidos), la nación más rica y poderosa del mundo; ha hecho mucho peor al pueblo de El Salvador.

Y la MS-13 no está sola; facciones de la infame pandilla Calle 18 también aterrorizaron al país antes de la ofensiva del gobierno. Más de 100,000 miembros de pandillas y asociados deambulaban por las calles de una nación de menos de 6.5 millones de personas.

Durante años, libraron guerras entre sí y contra el gobierno, convirtiendo barrios y ciudades en campos de batalla ingobernables. Impresionaban a preadolescentes en sus pandillas o exigían favores sexuales de niñas preadolescentes, o mataban a toda la familia y aún así tomaban al niño o niña.

Como resultado, El Salvador ha sido durante mucho tiempo una de las naciones más peligrosas de la Tierra. De hecho, era tan peligroso que muchos de mis colegas demócratas han argumentado que aquellos que huyen del país deberían ser automáticamente elegibles para asilo aquí.

A fines de marzo de 2022, hace dos años, la nación alcanzó su punto de ruptura cuando los miembros de pandillas cometieron 87 asesinatos en un solo fin de semana, matando a más personas en tres días que en todo el mes anterior.

Trágicamente, el 26 de marzo de 2022 marcó el día más mortífero en El Salvador desde el fin de la guerra civil de esa nación hace 30 años. Finalmente, la gente había tenido suficiente. El presidente Bukele solicitó la declaración de un estado de emergencia y la Asamblea Nacional estuvo de acuerdo.

El gobierno desplegó tropas por todo el país, abrumando a las pandillas y arrestando y encarcelando a sus miembros. Un miembro activo de una pandilla le dijo a los reporteros: "Había demasiados soldados por todos lados, de repente".

Según estimaciones recientes, el gobierno de Bukele ha encarcelado a más de 75,000 miembros de pandillas y ha matado a cientos más.

La estrategia anti-pandillas de prisión o muerte del presidente Bukele ha funcionado. En 2022, el número de asesinatos en El Salvador se redujo casi un 57% y luego cayó otro 70% el año pasado. En 2018, la tasa de asesinatos en El Salvador era de 53 por cada 100,000 habitantes; el año pasado fue de 2.4 por cada 100,000.

Para ponerlo en contexto, Washington D.C. tuvo una tasa de asesinatos de 40 por cada 100,000 el año pasado. Eso significa que estuve mucho más seguro hace dos días en lo que alguna vez fue la capital mundial del asesinato de lo que cualquiera de nosotros está hoy en el Washington de Joe Biden.

Nota del traductor: ese último párrafo se refiere a que el estuvo mucho más seguro en su visita a El Salvador en comparación a su seguridad actual en la Washington de Joe Biden. Recordando que Washington D.C. es la capital de USA.

Sin embargo, Joe Biden, uno de los líderes menos populares, menos exitosos y más procriminales del mundo, le está dando lecciones a uno de los presidentes más populares y logrados del hemisferio sobre crimen.

En particular, la Administración Biden ha expresado su preocupación de que la declaración de emergencia, que suspende ciertas protecciones del debido proceso, sea una amenaza para el estado de derecho, aparentemente una amenaza aún mayor que los miles de pandilleros al acecho.

El presidente Biden evidentemente no entiende que el orden es un prerrequisito para la ley; de hecho, es un prerrequisito para la nación.

Sin orden y sin el monopolio estatal de la fuerza, no tienes un país y ciertamente no puedes tener una democracia.

Quizás las tácticas del presidente Bukele son duras, no lo creo, pero se lo concederé, pero también eran absolutamente necesarias para establecer el orden. Y recordaría a la Administración Biden que los miembros de las pandillas de El Salvador no son víctimas; son asesinos, violadores y muchos de ellos tienen sangre estadounidense en sus manos.

Vi de cerca a miles de estos salvajes, o diablos, como los llama el presidente Bukele, cuando recorrí el Centro de Confinamiento del Terrorismo, la enorme prisión nueva que alberga a decenas de miles de miembros de pandillas.

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Los reclusos viven juntos por docenas en celdas grupales, no salen al exterior, no toman clases, no reciben visitas, la mayoría nunca saldrá. Guardias armados están en todas partes a las que te giras dentro de la prisión de triple muro, incluidos los techos de acero, para que los guardias puedan monitorear a los reclusos desde arriba.

Algunos llamados grupos de derechos humanos se quejan de esta prisión. Supongo que piensan que es demasiado dura y no es un Club Med.

Nota del traductor: cuando el senador menciona un Club Med se refiere a una cadena de resorts llamado Club Med, que es una cadena de resorts todo incluido que ofrece vacaciones en destinos exóticos.

Concederé eso, pero los reclusos reciben comida y agua, realizan higiene personal diariamente, médicos y enfermeras trabajan en una estación de auxilio junto a las celdas. Estos mismos grupos también se quejan de una supuesta falta de debido proceso.

No sé, llámenme loco, pero si es ilegal pertenecer a una pandilla y tienes tatuajes de la MS-13 por todo tu rostro y cuerpo, no estoy seguro de qué más proceso te es debido. Quizás eso sea solo yo.

No, las víctimas no son los diablos que encontré en el Centro de Confinamiento del Terrorismo.

El pueblo de El Salvador son las víctimas y, después de años de abuso, los salvadoreños respetuosos de la ley, particularmente aquellos de las clases pobres y trabajadoras, apoyan abrumadoramente los esfuerzos del presidente Bukele para restaurar el orden y una regla de derecho significativa.

Tengo la esperanza de que los líderes de El Salvador ayuden a traer estabilidad y prosperidad a una nación que merece algo mejor que el terrorismo de pandillas, y le insto a la administración a que, si no está dispuesta a ayudar, al menos no se interponga.

Finalmente, el ejemplo de El Salvador no solo expone los fracasos del enfoque de política exterior del presidente Biden, sino también su enfoque hacia el crimen. Si nada más, el presidente Bukele ha demostrado una vez más que el encarcelamiento funciona.

Obviamente, si encierras a asesinos, increíblemente habrá menos asesinatos, una verdad tan obvia que solo los ideólogos liberales podrían no verla.

Nota del traductor: recordando que en USA llaman liberales a los de ideología socialista, especialmente de las variables neo-marxistas.

Tristemente, eso es lo que tenemos en muchos lugares en el sistema de justicia penal de hoy: abogados progresistas (nota: se refiere a los abogados socialistas o simpatizantes del socialismo cultural en USA) que se niegan a procesar a criminales, jueces progresistas que se niegan a sentenciarlos adecuadamente y políticos progresistas que aprueban leyes de liberación de prisioneros para liberarlos.

Mientras sigamos persiguiendo estas políticas progresistas, nuestras comunidades, lamentablemente, seguirán pareciéndose más y más a El Salvador, no al El Salvador de hoy, sino al de hace apenas unos años.

Datos extra

El Salvador quiere ser amigo de todos los países, tal y como ha dicho Nayib Bukele en el pasado en reiteradas veces.

imagen 20 de marzo 2024
Bukele en su cuenta de X (antes Twitter), compartiendo una entrevista que le hicieron al senador en el canal de televisión Fox News donde habla sobre su visita oficial a El Salvador.

La entevista completa que le hizo Fox News y la cual compartió el senador Cotton y Bukele (unos segundos de la misma) en X.com es la siguiente.

Un día despues de compartir la publicación que se ve en la imagen, Bukele también compartió en su perfil de X unos segundos del discurso que hemos visto en esta publicación, el discurso dado en la Cámara del Senado de USA.

Y otro dato extra que vale la pena mencionar es que en el año 2023 también otro político estadounidense visitó El Salvador, cambiando así completamente su postura con El Salvador, nos referimos al senador Marco Rubio.

Marco Rubio también es otro senador (a la fecha de visitar El Salvador tanto Marco Rubio como Tom Cotton eran parte de los cien senadores de la Cámara del Senado en Estados Unidos) y Cotton han sido los dos senadores que han visitado El Salvador entre el 2023 y 2024.

Curiosamente, Marco Rubio visitó El Salvador y se reunió con el Presidente Bukele en marzo del 2023 y el senador Cotton lo hizo prácticamente un año después, en marzo del 2024.

Solo que en esta visita oficial, Cotton fue un poco más allá que Marco Rubio ya que visitó la cárcel CECOT para ver de primera mano a todos los pandilleros sacados de las calles en los meses en que El Salvador lleva aplicando el Estado de Excepción para sanear el territorio nacional.

Resumen

En resumen, el Senador Cottón simplemente vino a ver de primera mano los cambios positivos en materia de seguridad realizados en El Salvador, a diferencia de como la administración del Presidente Joe Biden opera (siendo su administración progresista, siendo una de sus características ser amigos del crimen y la delincuencia).

Al promover Biden junto a sus partidarios ideológicos y de partido, tal y como Cotton mencionó textualmente en su discurso en la Cámara del Senado:

... el ejemplo de El Salvador no solo expone los fracasos del enfoque de política exterior del presidente Biden, sino también su enfoque hacia el crimen.

Tristemente, eso es lo que tenemos en muchos lugares en el sistema de justicia penal de hoy: abogados progresistas (nota: se refiere a los abogados socialistas o simpatizantes del socialismo cultural en USA) que se niegan a procesar a criminales, jueces progresistas que se niegan a sentenciarlos adecuadamente y políticos progresistas que aprueban leyes de liberación de prisioneros para liberarlos.

Mientras sigamos persiguiendo estas políticas progresistas, nuestras comunidades, lamentablemente, seguirán pareciéndose más y más a El Salvador, no al El Salvador de hoy, sino al de hace apenas unos años.

Esta misma postura ideológica, la cual se puede denominar una variante neo-marxista (lo que se conoce como progesista o progresismo) es la que tiene Gustavo Petro de Colombia, quienes premian a los delincuentes.

Las políticas de este tipo una de las cosas que hacen es fomentar e incentivar el crimen, la delincuencia, el caos y el desorden. En este caso tomando como ejemplo el tema de seguridad pública.

Esta ideología entre sus características está la de convertir a los criminales en las víctimas y a la sociedad como victimario.

Vale la pena hacer mencionar que Gustavo Petro también ha sido uno de los críticos de los cambios que han sucedido en El Salvador en tema de seguridad.

También ya hemos visto como Bukele y Petro han tenido discusiones en Twitter (x.com) donde se han criticado el uno al otro, además de tirar alguna que otra indirecta.

Publicado el: 21 de marzo 2024.

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